La periimplantitis es un enfermedad causada principalmente por las bacterias de la placa dental, que provocan una inflamación de los tejidos que rodean el implante, provocando pérdida de hueso, y por consiguiente produce que el implante no se fije correctamente.
Sin embargo, hay otros motivos que derivan en periimplantitis, por ejemplo:
Hay que valorar todos los riesgos a la hora de colocar un implante, como decíamos anteriormente, si el paciente tiene patologías periodontales, enfermedades sistémicas como diabetes, osteoporosis o, enfermedades hormonales como problemas tiroideos, hay mayor propensión a la periimplantitis.
También tendrían mayor riesgo de pérdida de implantes los pacientes que no tienen una buena higiene bucodental, así como grandes fumadores y bebedores.
El sitio donde se va a colocar el implante debe tener una cantidad y grosor suficiente que permita colocarlo y orientarlo correctamente.
Normalmente, donde ha habido una pieza en la que se ha practicado una endodoncia, que posteriormente se han extraído debido a una infección, tienen un mayor riesgo de fracaso de implantes.
Hoy en día hay una gran variedad de implantes, con distintos materiales, tratamientos, conexiones… que van cambiando con el tiempo y muchas veces se dejan de fabricar las piezas de reposición, lo que supone un problema.
Hay un factor importante, la contaminación en función del tratamiento del implante:
Lo más importante en una prótesis, o corona, sobre un implante, es que permita una correcta limpieza, para evitar acumulación de bacterias con la consiguiente infección.
Tenemos las dos opciones:
Es muy importante concienciarse que un implante, aunque no es un diente «real» necesita un mantenimiento y un cuidado. Debemos acudir al odontólogo para levantar las prótesis al menos cada dos años, antes en el caso de que notemos que se han aflojado o despegado.
Las prótesis también deben someterse a una limpieza ultrasónica, corrigiendo los lugares donde se depositan más residuos.
La periimplantitis es una enfermedad que depende de varias causas, las más importantes son las relacionadas con los antecedentes médicos del paciente y el tipo de implante que se utilice.
Una vez colocado el implante hay que seguir las indicaciones del odontólogo en cuanto a limpieza y por supuesto mantenimiento de su prótesis, acudiendo a revisiones periódicas, tanto para esta pieza como para el resto de su dentadura.